Una cuestión de tiempo

Probablemente yo soy un tipo de sensibilidad facil al que le apasionan las peliculas de amor. Según mi amigo "Javi Javier" disfruto especialmente con el género que él califica como "de amor y de muerte"...y seguramente tenga razón.

Por eso esta película me ha gustado tanto. Partiendo de una idea propia de la ciencia ficción, la posibilidad de viajar en el tiempo, Richard Curtis ha hecho una historia de amor preciosa, pero también un canto al amor entre padres e hijos, entre hermanos y el director sabe cómo jugar esas bazas pues es allí donde la cinta pone su fuerza, muy por encima de esa premisa fantástica,,,aquí no hay máquinas del tiempo, ni explicaciones ciéntificas...simplemente basta con apretar los puños en un lugar oscuro y pensar a que momento ya vivido se quiere volver...salvo por una cuestión añeatoria que puede hacer que tu vida cambie y eso también lo aprenderá el protagonista.

La película así pues tienen sus puntos más fuertes en las escenas donde el protagonista quiere conoce a la chica de sus sueños y sus tretas para conseguirla, aunque el recuerdo de su primer amor también es un gran momento de la historia...y por otro lado aquellos momentos entre padre e hijo que son emocionantes y que deben hacer reflexionar al espectador sobre cuál es la relación con sus progenitores.

El director Richard Curtis autor de los guiones de hits como "Cuatro bodas y un funeral", "Notting Hill" y de "Love actually" que también dirigió, muestra sus cartas que casi siempre son idénticas, personajes adorables, sencillos, ingeniosos, gruñones...situaciones comunes pasadas por un filtro de ligero toque mágico y una manera de mostrar el paso del tiempo, aquí mostrado en las despedidas y encuentros en la estación de metro...y siempre trufado por una banda sonora de canciones precisa y acertada.